Adán y Eva pecan
Nuestro Dios es el Dios Todopoderoso que creó los cielos, la tierra, y todo lo que vemos y lo que no podemos ver. En su infinita bondad, Él nos dio lo que creó para que lo disfrutáramos y lo administráramos. Él hizo este mundo para su gozo y nos creó para que vivamos unidos a Él. Cuando el pecado amenazó esa relación, Dios puso en marcha un plan para salvar al mundo. Él mismo se entregó en sacrificio. Cuando la corrupción intentó arruinar el mundo, Dios proveyó un remedio para el pecado a través de su perfecto Hijo, el Salvador del mundo. Ese Salvador vino como descendiente de Adán, de Noé y de Abraham. A través de ese linaje recibimos al Salvador, y todo comenzó en el principio del mundo.
En esta sesión, los niños aprenderán que Dios es santo y que el pecado nos separa de Él. Les recordaremos que Dios los creó y que todos, tanto Adán y Eva como nosotros, cometemos errores. Aprenderán que ¡Dios los ama a pesar de todo!