En esta sesión, leeremos acerca de una visita no deseada que interrumpió la cena para derramar un frasco de perfume sobre los pies de Jesús. El pecado y la reputación pasados de la mujer hicieron que el anfitrión se molestara. Después de todo, el anfitrión pensó que si Jesús era quien decía ser, sabría qué clase de mujer era y la apartaría. En vez de eso, Jesús le dio a él, y nos dio a nosotros, una imagen clara de cómo Él lidia con el pecado y la vergüenza del pasado que pueden impedir que las personas se acerquen a Él.